Sendero del Rio

El sendero discurre a lo largo del río, entre las poblaciones de Benamahoma y El Bosque. Tiene una longitud aproximada de 5 kms. Debido a la suavidad del recorrido es practicable por niños y personas no habituadas a caminar por el campo. Existe una modalidad corta a la que llamamos "sendero periurbano", recomendable para los que deseen un atractivo paseo de ida y vuelta. Esta variante se inicia en El Bosque, junto al Albergue Juvenil, y continúa por el sendero del río El Bosque hasta la "Fábrica de la Luz", desde donde lo abandona tomando un camino que nos conduce de nuevo a El Bosque por el Camino de Los Pescadores o por la Bda. La Feria. Este itinerario pasa por la misma puerta del Jardín Botánico, que es visita obligada para los amantes de la naturaleza y del senderismo.

DESCRIPCIÓN: Se recomienda hacer el recorrido en dirección Benamahoma-El Bosque, y de ese modo efectuaremos el itinerario en sentido descendente; aunque es perfectamente factible hacerlo en sentido contrario. El río El Bosque, nace al pie de la Sierra del Pinar, con el aporte permanente del Nacimiento de Benamahoma, que se encuentra por encima de la piscifactoría de la localidad. Junto a ella se encuentra el Museo del Agua, lugar donde se ofrece una visión de la estrecha relación que desde siempre han mantenido el hombre y el agua. Desde este lugar parte un camino que conecta con el inicio del sendero, junto a la depuradora de aguas residuales de Benamahoma. A poco que caminemos, nos veremos totalmente rodeados del bosque galería, así llamado porque al crecer en ambas orillas y elevarse sobre el cauce forma un túnel vegetal de gran belleza y frescura. El bosque galería realiza una función muy importante en cuanto a protección de los márgenes, evitando en gran medida el arranque de materiales por el agua,; por lo tanto conserva el valiosísimo suelo y evita la colmatación de los pantanos. Los chopos, sauces, adelfas, lianas, zarzaparrillas, rubias, rosales, zarzas, clemátides y madreselvas son los árboles y arbustos más frecuentes en este primer tramo, junto con los helechos, creciendo tan apretadamente que hacen impenetrables las orillas del río, proporcionando refugio seguro a la abundante fauna que aquí reside.

Siguiendo el camino, iremos encontrando antiguos batanes, en los cuales se trataban, mediante el agua y el golpeteo de palas de madera, los tejidos de lana antes de ser usados. De esta forma se les daba "apresto", lográndose que mantas y ponchos fueran muy resistentes e impermeables al agua. Los batanes aprovechaban la fuerza motriz del agua, pudiéndose apreciar la canalización de ésta por los caos o canales encargados de captarla río arriba, en pequeñas presas o zúas. Los caos transcurren por la parte superior de las terrazas fluviales adyacentes a los batanes. Hoy están colonizadas por chopos, zarzas y un variado matorral, así como por laureles y frutales, plantados en su día para consumo propio de los lugareños. Durante el recorrido podremos ver y oír gran cantidad de aves, tales como la inquieta lavandera cascadeña, el ruiseñor bastardo con su potente canto o las abundantes currucas, herrerillos o carboneros, con suerte, en otoño y primavera algún Martín Pescador pase veloz ante nuestra mirada. Si observamos dentro del agua veremos barbos, truchas, y quizás algunas culebras de agua, y si la fortuna os acompaña, cosa improbable, podremos ver a la siempre esquiva y precavida nutria.

Conforme avanzamos se hacen más numerosos los sauces, destacando los mimbres con sus hojas verdes brillantes por el haz y blanquecinas y aterciopeladas por el envés, haciendo que el árbol relampaguee cuando lo mece el viento. Durante este tramo el río El Bosque discurre encajonado entre la Sierra del Labradillo (1.109 m), a su derecha, y la Sierra de Albarracín (977 m), a su izquierda, sucediéndose rápidos y pequeños saltos, en los que el agua realiza una labor erosiva. El río sale de su encajonamiento en el lugar conocido como la Fabrica de la Luz o Eléctrica de la Sierra, tal como reza en la fachada del edificio. Este fue uno de los recursos más interesantes que se ha obtenido de la fuerza del río, una energía limpia y “autóctona”. El agua era captada río arriba en la zona de los Batanes, en una zúa, y conducida por medio de un canal que discurre por la falda de la Sierra del Labradillo hasta un pequeño embalse, desde donde bajaba en vertical por un tubo, aprovechándose este salto para la producción de electricidad. La Eléctrica de la Sierra dejó de funcionar en 1963. Durante el trayecto recorrido, además del bosque galería con sus típicos árboles de ribera, encontramos en las zonas más distantes del cauce un bosque mediterráneo en el que predomina el quejigo, el algarrobo, la encina y el acebuche. A partir de la Fábrica de la Luz el río discurre por una vega en la que los árboles de ribera ceden el sitio a los cultivos, aunque se mantiene el bosque galería con sauces, chopos, olmos y fresnos en las orillas. Conforme avanzamos la vega se va ensanchando. Encontramos en primer lugar un edificio llamado Molino de Arriba, y un poco más adelante la población de El Bosque y la segunda piscifactoría truchera, que se encuentra junto al Molino de Enmedio, hoy transformado en Albergue y Campamento Juvenil. En este punto podemos dar por terminado el itinerario, restando 500 metros para llegar al Hostal las Truchas, junto a la carretera. Ya fuera del itinerario existe un tercer molino, llamado Molino de Abajo, que es el único en condiciones de uso por mantener el caz con agua y su mecanismo en perfecto estado, y que se encuentra visitable, pero solo para grupos organizados previa cita telefónica. Una vez que el río abandona el pueblo, penetra en vegas cada vez más amplias, hasta desembocar en el pantano de los Hurones, que suministra agua a Jerez y a toda la Bahía de Cádiz.

Centro de Visitantes y Oficina de Información Dotada con exposición y audiovisual sobre el Parque Dirección: Avda. de la Diputación s/n - 11670 El Bosque. Tlf.: 956716063